MANUEL GÁMEZ HEREDIA -La salesianidad por bandera-

MAnuel Gámez Heredia

           Manuel Gámez Heredia “Momo” había nacido en Cádiz, el día veinticinco de septiembre de 1928, hijo de Serafín Gámez y de Teresa Heredia. A los siete años ingresa en el colegio salesiano de Cádiz (año 1935), y permanece en él, hasta el curso 1940/1941. Posteriormente entra en la Escuela de Aprendices de los Astilleros de Cádiz, donde cursa hasta el año 1943 su Formación Profesional.

   Una vez que termina su enseñanza profesional, pasa a trabajar en el “Taller de calderería de hierro” y también en el “Taller de coches metálicos”, hasta el año 1947. Este mismo año, empieza a trabajar como “Obrero Portuario”, terminando en la Casa Navina-Ibarra, como Capataz General, hasta 1984, año de su jubilación.

  Estaba casado con Doña Luisa Parra Flores, desde el doce de marzo de 1955, de cuya unión han nacido siete hijos, Serafín, Cecilia, José Luis, Rosario, Milagros, Antonio y María Auxiliadora. Era abuelo de doce nietos y bisabuelo de cinco bisnietos.

  A finales de la década de los cincuenta, entra a formar parte de los equipos de fútbol que participaban en el campo del colegio salesiano. Posteriormente se integra en la Asociación de Antiguos Alumnos participando en la Junta Directiva de D. José Manuel Sánchez Gey y lo hizo en la vocalía de deportes, donde desempeño esta labor durante tres años. Igualmente estuvo en las Juntas Directivas de D. Antonio Verdugo y D. José Mesa llevando la tesorería de la Asociación.

  En la Asamblea General de junio de 1974, Manuel Gámez Heredia -Momo para los amigos- como él mismo decía, es elegido Presidente de la Asociación a propuesta de la Junta Directiva saliente.

1988 Junta Directiva aa.aa con el Rector Mayor

       La aportación principal de “Momo”, al colectivo de Antiguos Alumnos Salesianos, ha sido desde sus comienzos “La Salesianidad por bandera”. Su entrega y trabajo constante, su Eucaristía diaria, acompañada de su cariño y devoción a María Auxiliadora y San Juan Bosco, todos estos gestos de amor, estaban presentes en cada acto que la Asociación programaba.

    Siempre pensando en el Colegio, en la Asociación y en la manera de llegar a los más jóvenes. Desde su primera presidencia, incentivó la participación de la mujer y los jóvenes en la Junta… Durante treinta años de directivo (Veinte de presidente, tres de Vocal de deportes y siete de tesorero) le ha valido para ser el Antiguo Alumno, que más tiempo ha pertenecido a la Junta Directiva de la Asociación de Antiguos Alumnos Salesianos de Cádiz.

    Pero nuestro querido Momo, como a él le gustaba que le llamaran sus amigos, era un gaditano amante de las tradiciones de su tierra. Desde cargar los pasos de Semana Santa (Afligidos, Virgen de las Angustias – Ecce-Homo, Virgen de Los Dolores -Nazareno, Virgen de Las Angustias- Caminito, Madre del Mayor Dolor, Cristo del Perdón, Virgen del Rosario, etc.), hasta salir cantando en los famosos coros de carnaval (Los Bastones de Caramelos, Capricho Azul, Mensajeros del Tanguillo, Fantasía Rusa, Caballeros de Nueva Orleans).

31.01.1988 Inauguración del azulejo de la gratitud

      Al finalizar su etapa de directivo de la Asociación, seguiría viniendo día tras día al Colegio, echaba su partida al dominó y acudía a su Eucaristía y luego marchaba para su casa. Así hasta que las piernas empezaron a darle problema. A partir de ese momento, solía venir a ver a su Madre Auxiliadora todos los veinticuatro de cada mes. En su casa, seguiría pensando y soñando con todo lo salesiano, sus amigos, y lo hacía a través de una afición que tenía, escribir. 

      Recordaba su vida en el colegio, la Asociación y lo plasmaba en hojas y hojas cuadriculadas, con una escritura de las de antes, que después encuadernaba y regalaba a los amigos. Así escribía Momo sus libros para sus amigos, a mano… Recuerdo que me comentaba que estaba recopilando “Las Bodas de Plata de la Procesión de María Auxiliadora, a hombro, como se llevan en Cádiz los Pasos”. Actualmente llevaba escrito de esta historia más de 160 libros, y todos a mano…

      Querido Momo, por tu don de güenagente, tu ha sido uno de los Antiguos Alumnos Salesianos más querido y laureado de España… Insignia de Oro de la Confederación Nacional, Insignia de Plata de la Federación Regional de Sevilla, Presidente Honorifico y Primera Placa de Plata de la Asociación de Cádiz, Capataz Perpetuo del Paso de María Auxiliadora, y un sinfín de homenaje…

22.06.1991 Imposición de la Insignia de Oro a Momo

            Pero el mayor homenaje que te has llevado en esta vida, es que te has ido a la Casa del Padre, con tu imagen de María Auxiliadora entre tus manos y tu pecho. Aquella imagen que te trajera tu nieto de Turín, esa madre pequeñita, te llevo al Padre con los deberes hecho.

    Como decía el Poeta Antonio Machado:

“Moneda que está en la mano

quizás se deba guardar,

pero la que está en el alma

se pierde si no se da.

      Y tu no dejaste que se perdiera, entregaste con tu trabajo y tu amor, todo lo que llevabas dentro. Hasta siempre Momo y Gracias al Señor del Amor y a María Auxiliadora por habernos regalado tu vida. 

Eugenio Mariscal Carlos,