SALUDO DEL DIRECTOR

Queridas amigas y amigos

Trabajamos, trabajamos y trabajamos. Empleamos mucho tiempo y energía en desarrollar tareas, hacer trabajos, cumplir con horarios y ser eficaces.

Si miramos hacia atrás y tratamos de recuperar cómo ha sido nuestro proceso educativo, el nuestro de cada uno, caemos en la cuenta que hemos sido educados justamente para esto. En el Colegio, en nuestras familias y el ambiente en general nos conducía hacia el hecho de ‘ser eficaces’ para hacernos ‘hombres y mujeres de provecho’.

Concluye uno de los cursos escolares más complejos de esta historia reciente.

Vaivenes, incertidumbres, miedos, confinamientos, soledades. Ha quedado más que demostrado que hay cosas que se nos escapan y que no llegamos a controlar, por sí no hubiéramos caído en la cuenta.

De todas las clases de lengua, matemáticas, horas de taller, etc, es probable que lo más se nos quede en el recuerdo hayan sido los momentos de ánimo por parte de un educador, la palabra en el patio cercana ante situaciones que se nos escapaban. Los educadores han jugado un papel fundamental. Siempre lo han jugado.

La educación, es cosa del corazón; eso decimos nosotros en nuestros foros y reuniones. Siempre lo ha sido. Hemos sabido combinar la exigencia en el estudio con la cercanía en las emociones. Es nuestro sistema.

Un reconocido recuerdo hacia todos los educadores de nuestra Casa, de los Colegios e Institutos que han puesto en juego mucha inteligencia y creatividad.

Ahora toca descansar y reponer las fuerzas físicas y emocionales.

Feliz verano y feliz descanso, para quien tenga la oportunidad.

Marco A. Vázquez Fernández, SDB Director

No hay comentarios: